De acuerdo con el DANE, en el segundo trimestre de 2022 el Valle del Cauca registró un crecimiento económico del 12,1%, impulsado principalmente por el sector de la construcción, servicios profesionales, comunicaciones, sector de las TIC, entre otros.
En el sector de servicios, la región continúa consolidándose como un destino atractivo para la inversión extranjera directa, según comenta Invest Pacific, porque ofrece una ubicación estratégica, costos competitivos, talento humano calificado, infraestructura, conectividad, tejido empresarial y calidad de vida. Para agosto de 2022, el Valle del Cauca concentra 808 empresas pertenecientes al clúster de economía digital; de estas, 27 son de BPO/KPO y 26 son de ITO, según Invest Pacific.
Adicionalmente, la Gobernación del Valle del Cauca en reciente publicación resaltó que el sector de actividades artísticas, entretenimiento y recreación registró un crecimiento del 36,5% y el comercio un 23,3%, lo cual, en términos del secretario de Desarrollo Económico y Competitividad del Valle “demuestra que los empresarios son resilientes, los empresarios a partir de todas las vicisitudes que tuvimos lograron sacar adelante el departamento apostándole a la empleabilidad”.
En ese contexto, el Proyecto de Reforma Tributaria presentado por el Gobierno Nacional el pasado 8 de agosto, contiene una serie de propuestas que de ser aprobadas alterarían la dinámica económica de la región, dado que, entre otros puntos: (i) se desmontaría la exención para economía naranja en donde se incluyen precisamente actividades artísticas, entretenimiento y recreación; (ii) se eliminaría la exención para inversiones en el agro particularidad que potencialmente afectaría la región dado que el mayor porcentaje de exportaciones se concentra en productos agroindustriales; (iii) se crearía un impuesto al consumo a bebidas y alimentos azucarados; y (v) se incluiría un umbral mínimo de exportaciones para mantener la tarifa de renta especial del 20% para usuarios de zona franca, aspecto que impactaría especialmente al Valle del Cauca dado que aquí se concentra una proporción importante de todas las zonas francas del país.
Si bien en el Proyecto no se propone incrementar la tarifa de renta corporativa, lo cierto es que el desmonte de exenciones como las comentadas y la inclusión de una limitación general a beneficios y estímulos tributarios (como máximo el 5% de la renta líquida ordinaria), produciría como resultado un aumento en la base impositiva y por tanto en el impuesto de las sociedades; adicionado a que se propone aumentar la tarifa del impuesto sobre los dividendos (del 10% al 20% para inversionistas del exterior), lo cual sin duda generaría un aumento significativo en la tributación sumada entre sociedad en inversionistas.
Con ese panorama, será necesario estar al tanto del avance del proyecto ante el Congreso de la República para verificar los ajustes naturales que se dan en los debates, en los que seguramente se pondrá foco en estos asuntos de material importancia para el empresariado y la economía regional y nacional.
Escrito por: Carlos Alberto Lemos – Asociado Senior de Tributario.