Bogotá D.C., 13 de marzo de 2024.

Escrito por: Manuela Zuñiga, estudiante semillero.

Urabá, la subregión más extensa de Colombia, con once municipios estratégicos, destaca por su ubicación costera que la conecta crucialmente con Antioquia y una salida al mar, convirtiéndola en una zona estratégica socioeconómica. Económicamente, ha sido pionera en dinámicas agropecuarias, destacándose por la producción de banano, plátano, ganadería, agricultura, pesca, explotación de madera y turismo, contribuyendo significativamente al panorama económico colombiano.

Sin embargo, a lo largo de su historia, Urabá ha sido testigo de conflictos y actos violentos, con la presencia de grupos armados al margen de la ley. Este territorio ha sido invadido por violencia, amenazas y desplazamientos forzados, utilizados para la ocupación de tierras con el fin de aprovechar los cultivos de los invasores ilegales. No obstante, con el tiempo, y en consonancia con el proceso de paz y la desmovilización de grupos armados, Urabá ha experimentado una transformación significativa. La región se ha dedicado a la construcción de un tejido empresarial sólido que sustenta su economía, promoviendo el avance social, laboral y económico de la región.

De acuerdo con la Cámara de Comercio de Urabá y la Universidad de Antioquia, en el año 2019, previo a la pandemia del COVID-19, la economía de Urabá demostró un desempeño notable, caracterizado por la creación y renovación activa de empresas, con un total de 11.961 empresas constituidas en la región. La microempresa emergió como líder en la zona, no sólo contribuyendo a la mejora de la calidad de vida, sino también generando un aumento sustancial de empleos para los ciudadanos de Urabá.

La llegada de la crisis sanitaria del COVID-19 en el 2020 trajo inestabilidad económica, especialmente en el sector comercial, llevando a los comerciantes a demostrar adaptabilidad y resiliencia. Indica la Cámara de Comercio de Urabá que, aunque solo el 11% de las empresas lograron operar en 2020, las cifras de desempleo fueron inferiores al promedio nacional, con el 50% de las empresas sin realizar despidos y solo el 10,7% despidiendo entre 2 y 5 empleados. Sin embargo, los impactos generados por la pandemia son innegables.

Con la superación de la pandemia y sus consecuencias, tanto el sector público como el privado han desplegado esfuerzos significativos para asegurar la supervivencia de las empresas y facilitar la recuperación así como un continuo crecimiento del desarrollo económico en Urabá. En respuesta a los desafíos presentados por la pandemia, el Plan de Desarrollo de Antioquia 2020 – 2023 ha establecido diversos ejes y estrategias con el objetivo de mitigar los impactos negativos y fomentar el desarrollo económico y social en la región.

Dentro de estos componentes y estrategias, se determinó un componente dirigido a la infraestructura en Antioquia. Además de resaltar la importancia de la infraestructura para el transporte terrestre y aéreo, destacó la red fluvial de Antioquia, indicando que la subregión Urabá cuenta con tres puertos de carga concesionados y operados a través de la Agencia Nacional de Infraestructura.

Con el fin de potenciar este aspecto y generar un impacto positivo en la economía, el Plan de Desarrollo de Antioquia 2020 – 2023 resaltó las iniciativas de transporte de carga, manteniendo la continuidad de estos macroproyectos y fomentando la anticipación al impacto que se espera en la región una vez que se inicie su implementación. Estas iniciativas incluyen Puerto Antioquia, Puerto Pisisí y Darien International Port, concebidas con el propósito de impulsar la actividad económica en la región de Urabá y contribuir al desarrollo integral del departamento.

La planeación y ejecución de los puertos en Urabá genera una expectativa significativa de impacto y estímulo económico a corto plazo en la región. La implementación de estos puertos tiene como objetivo reducir los costos asociados con las exportaciones e importaciones, lo que a su vez se traducirá en el desarrollo territorial, la generación de empleo, la promoción de la educación en asuntos portuarios, y el bienestar general de la población en la subregión.